Único en su género en México, registra resultados positivos con primeros egresados del sistema
Con la extinción de la acción penal y el sobreseimiento de la causa, con efectos de sentencia absolutoria; cuatro participantes del Tribunal para el Tratamiento de Adicciones concluyeron en forma satisfactoria el programa, convirtiéndose en la primer generación en egresar del sistema.
José Antonio Arroyo Velázquez, Juan José Arellano Reyes, Rigoberto Robles Molina, y Javier Guadalupe Molina Álvarez, se convirtieron en los primeros egresados del programa.
El Tribunal para el Tratamiento de Adicciones busca la rehabilitación de quienes, por primera vez, cometen un delito bajo el influjo de las drogas o el alcohol, a cambio de someterse a un tratamiento de desintoxicación, logrando su recuperación y reincorporación social de manera productiva.
El Tribunal para el Tratamiento de Adicciones fue emprendido en coordinación con la Procuraduría General de la República, contando con el apoyo en capacitación de personal del Departamento de Estado de los Estados Unidos de América, involucrando en el programa a la Procuraduría General de Justicia, la Secretaría de Salud y el Instituto de Defensoría Pública de Nuevo León.
Con el resultado exitoso de los cuatro egresados en el tratamiento, se ordenó girar oficio para cancelar los antecedentes penales que se hayan realizado a los imputados, para conocimiento y efectos legales correspondientes.
En una ceremonia especial, en la que estuvieron presentes sus familias, los cuatro egresados del Tribunal para el Tratamiento de Adicciones recibieron un reconocimiento de manos del magistrado Jorge Luis Mancillas Ramírez, Presidente del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura de Nuevo León, y del gobernador Rodrigo Medina de la Cruz.
En la ceremonia, realizada en el Palacio de Justicia de Guadalupe, se presentó un video con los testimonios de los egresados en el que dieron constancia de su experiencia; posteriormente, Juan José Arellano Reyes, uno de los egresados, expresó su agradecimiento por los beneficios del programa.
“Este programa superó mis expectativas, ya que me hizo conocer otro estilo de vida muy diferente al que yo conocía, un estilo de vida de provecho, superación. El mismo programa me impulso a superarme pues yo había dejado mis estudios y los reinicié”.
Arellano Reyes expresó que haber concluido el tratamiento bajo la vigilancia de la autoridad judicial le ayudó a salir de la gran mentira que representan las adicciones.
“Si hoy es el fin de un programa, para mí significa el comienzo de una nueva etapa, de una nueva vida de provecho, esta nueva etapa consiste en reintegrarme a la sociedad y luchar por ser un ciudadano útil. Siento que estoy en deuda con la sociedad por lo que buscaré la oportunidad de ayudar a tantos y tantos jóvenes que carecen de apoyo moral, emocional y afectivo, que han heredado conductas perniciosas, que los imitan a un desarrollo pleno y por mi propia experiencia yo sé que con la ayuda adecuada se puede salir”.
Arellano Reyes mencionó que mientras estuvo en tratamiento concluyó sus estudios de secundaria, pronto iniciará la preparatoria, además de realizar estudios de computación e inglés, lo que demostró al finalizar su intervención con un breve mensaje en ese idioma, en el que manifestaba su interés por ayudar a jóvenes a alejarse del dañino mundo de las drogas.
“Entre los muchos aprendizajes que nos arroja esta experiencia interinstitucional, se encuentra una verdad inmutable: La justicia se abre paso ante cualquier circunstancia”, expresó el magistrado Jorge Luis Mancillas Ramírez al tomar la palabra.
“Una sociedad avanza cuando aprende de su pasado, cuando se da cuenta de sus errores y actúa en consecuencia. Es así como el Tribunal para el Tratamiento de Adicciones ha dado muestras de su eficacia, al buscar que sus candidatos se den cuenta de sus problemas y cambien su forma de ser, para lograr retos cada vez mayores que los conduzcan a un nuevo estilo de vida”, dijo el magistrado.
Expresó que el sistema de justicia busca conocer a quienes deben ser reincorporados a la sociedad y evitar que reincidan en los comportamientos ilícitos, buscando romper la cadena delictiva que es común en tales personas.
“Es verdad que el poder del Estado debe ser implacable con aquellos que atentan contra su estabilidad, eso está fuera de toda duda, sin embargo, aquellos que han actuado bajo influjos de sustancias que impiden su razonamiento, al quedar liberados de ellas se vuelven seres productivos que aportan su grano de arena a la transformación social de nuestro estado, como está probado en los casos que hemos visto”.
Reconoció y agradeció el esfuerzo de los egresados del programa al tiempo de resaltar lo que se puede lograr a través del trabajo coordinado de las instituciones que participan para hacer realidad la labor que se desarrolla en el Tribunal para el Tratamiento de Adicciones.
“Y, sobre todo, a todos los participantes presentes y futuros del programa, quienes a través de su esfuerzo diario, son la razón de ser de nuestro trabajo y en quienes depositamos la confianza que éste es el primero de muchos triunfos en este rubro, que serán muestra de la grandeza que siempre ha tenido el estado de Nuevo León”, finalizó.
Por su parte, el gobernador Rodrigo Medina de la Cruz resaltó el resultado positivo del programa, ejemplo de los esquemas innovadores que desarrolla el Poder Judicial de Nuevo León, marcando pauta a nivel nacional.
“Hemos escuchado los testimonios y el día de hoy Juan José que no únicamente ha salido adelante de su adicción, sino que ahora se está mejorando constantemente a través de la educación y de su preparación, nos dice que sí se puede, no es fácil el camino, salir de ese infierno de las adicciones, de las drogas, del alcoholismo cuesta mucho trabajo, una gran fortaleza interior, la ayuda de expertos, recursos del estado, decisión política, voluntad para salir adelante. Y todo eso lo hemos encontrado en este noble programa que el Poder Judicial ha liderado con gran éxito”.
Con el programa se demuestra “que sí es posible revertir y cambiar el curso de la vida de las personas, que sí es posible tocarlas para bien, que sí es posible enviarle un mensaje a la población de que ese mundo de las adicciones, de las drogas, son historias que nunca terminan bien, son historias que terminan siempre mal, pero que cuando entramos fuerte, cuando entramos y jalamos con la voluntad de quienes han estado involucrados en esto, de quienes sufren esa adicción sí logramos enderezar el camino, sí se puede.
Y con una vida que enderecemos basta y sobra para que este programa, este gran proyecto se justifique, la idea es hacerlo con decenas, cientos de personas, la idea es combatir estos males que tenemos en nuestra comunidad también por ese camino”, dijo el gobernador.
Consideró que una estrategia fincada únicamente en el combate a la delincuencia a través de la fuerza, es una estrategia incompleta, es una visión miope de la realidad.
“Por supuesto, como lo he dicho y lo repito, hay que fortalecer a nuestras instituciones de seguridad pública, de procuración de justicia, hay que entrarle con todo hacia aquellos que nos quieren hacer daño, aquellos que quieren envenenar a nuestra juventud, que quieren mancharnos la casa de sangre; pero, por otro lado, hay que darle oportunidades a la gente, hay que trabajar muy fuerte en el aspecto social, de generación de riqueza, de oportunidades de empleo, educativas, hay que impulsar fuerte al deporte, hay que hacer este tipo de programas como el que el Poder Judicial en este momento nos está compartiendo que son de gran éxito”.
El mandatario estatal felicitó a los graduados, exhortándolos a seguir adelante y ser ejemplo para propagar los beneficios del programa hacia otras personas.
“Si ustedes no imprimen su sello personal, su carácter, su firme voluntad de salir adelante, esto se queda en el camino, hay que contagiar cada vez a más personas, hay que traer cada vez más gente que requiera de este tipo de ayuda, yo sinceramente, reconozco este noble esfuerzo que se hace que ojala se pueda replicar en otras partes de la República, que creo firmemente en que los seres humanos podemos salir adelante y regenerarnos y que creo firmemente también que merecemos todos una oportunidad de demostrarlo”, finalizó.
En el evento también estuvieron presentes el Lic. Adrián de la Garza Santos, Procurador General de Justicia del Estado de Nuevo León; el General Jaime Castañeda Bravo, Secretario de Seguridad Pública del Estado; el Lic. David Peña González, Director del Instituto de Defensoría Pública del Estado; el Dr. Jesús Zacarías Villarreal, Secretario de Salud del Estado de Nuevo León; la Lic. Ivonne Álvarez García, Presidenta Municipal de Guadalupe; Jeafrey Bogart, representante del Cónsul General de Estados Unidos en Monterrey; así como magistrados, consejeros, jueces y servidores públicos del Poder Judicial de Nuevo León, además de presidentes y representantes de colegios, barras y asociaciones de abogados de la entidad.